Esteban Olmos aborda la fotografía como mira la vida. Unas veces con pasión, otras con sutileza. Esta imagen refleja perfectamente ambas dimensiones. La pasión por captar la sencillez (algunos lo llaman naturalidad) y la sutileza de las formas. Esta foto es una obra de arte. No es ninguna hipérbole, sino un ejemplo de creación a partir de una estructura perfecta. La integración de la modelo con el entorno, conformando un todo armónico, me parece magistral. Aquí os dejo este enlace con una muestra de la producción de Esteban.
